Cuidados y Consejos

Siembra

Primero elige una planta adecuada

Primero, elige una planta adecuada para el lugar en donde la quieres colocar. Hay plantas que requieren mucha luz y otras que necesitan más sombra para crecer..

Escoge un pote o maceta adecuados

Escoge un pote adecuado para el tamaño de tu planta. Necesitas uno en el que las raíces tengan suficiente espacio para desarrollarse.

Prepara la base y la tierra

Prepara el pote con una capa de piedras de unas 3 pulgadas. Esto es indispensable si siembras en un pote sin drenaje, ya que ayuda a que las raíces no se pudran por exceso de agua. Lo siguiente es colocar una capa de tierra abonada. Calcula que sea suficiente tierra, para que al sembrar, la planta quede a la altura de la boca del pote.

Prepara tu planta

Es el momento de poner la planta. Si tiene las raíces apretadas, suéltalas con mucho cuidado de no quebrarlas, usando tus manos. Termina de llenar el pote con más tierra alrededor de la planta y compacta con tus manos.

Ambiente y Luz

Luz Natural

Un espacio con una ventana soleada puede ser todo lo que sus plantas de interior con poca luz necesitan para funcionar bien, pero otras plantas de interior exigen cantidades de luz más brillantes y constantes para crecer adecuadamente. 

Luz Aritificial Roja

Las ondas de luz roja son esenciales para estimular que las plantas florezcan y produzcan frutos en el interior. Compre bombillas y accesorios LED diseñados específicamente para el cultivo de plantas. Por lo general, se denominan «luces de cultivo» porque están creadas para producir una gran cantidad de ondas de luz roja.

Luz Artificila LED

 Los LED de alto rendimiento generalmente son dos veces más brillantes que las luces de cultivo LED estándar. Estas luces ultrabrillantes son excelentes para cultivar plantas nativas de climas soleados y secos, como cactus, cítricos, romero y geranio. Planee iluminar las plantas con flores y frutos durante 16 a 18 horas al día. Coloque la fuente de luz a aproximadamente 12 pulgadas de distancia del follaje.

Luminarias de LEDs WALL-SPOT

Son ideales para jardinería interior en tiendas, oficinas y negocios donde la luz natural puede no estar garantizada en ningún momento del año, pero en las que queremos crear ambientes en los que las plantas tengan protagonismo.

Plagas

Cochinillas

Las cochinillas están provistas de un escudo que las protege de las amenazas del exterior.Dependiendo del tipo, varía el color y consistencia.

Estos animalitos usan su pico para clavarlo en las hojas de las plantas. De esta forma, succionan la savia, lo que hace que las hojas se tornen amarillas, se deformen y sequen.

Mosca blanca

Esta plaga es fácil de reconocer. Se trata de pequeñas moscas de color blanco que se asientan en la cara inferior de hoja. Si se mueve la planta con brusquedad, las moscas salen volando.

Trips

Estos son pequeños insectos que, a diferencia de los precitados, no causan muchos estragos. Con apenas unos milímetros, estos animalitos pican las hojas para extraer su savia, lo que produce un cambio de color en la planta. Estas se ponen plateadas, se secan y se caen.

Mosquito verde

El mosquito verde no tiene alas; solo es un buen saltador. Por esta razón, puede desplazarse de hoja en hoja.

Este insecto afecta las plantas, ya que tras su picadura las vuelven amarillas y pierden vitalidad. Los productos que se usan para erradicar pulgones también son efectivos contra esta plaga.

Riego

Riego desde Arriba

Para implementar esta técnica tenemos que verter directamente el agua sobre el sustrato, utilizando una herramienta adecuada como una regadera con el cuello estrecho. En este caso será un buen consejo tratar de poner particular atención en la operación para evitar que el agua pueda caer directamente sobre las hojas, ya que las dañaría

Riego por Debajo

En este otro caso la acción a realizar será el contrario de la recién mencionada, consistiendo en llenar de agua el platillo debajo de la maceta. De esa forma dejaremos que nuestra planta pueda absorber, a través de los agujeros de drenaje, la cantidad necesaria en los momentos necesarios. Más tarde, tras haber cuidadosamente controlando el estado del sustrato, procederemos a la eliminación de los residuos hídricos innecesarios que podrían dañar la planta.

Riego por inmersión

Para utilizar ese método para el riego de plantas de interior deberíamos colocar el tiesto directamente dentro de un recipiente lleno de agua. Tras un rato corto (10- 15 minutos) quitaremos el tiesto del agua. La operación siguiente será la de dejar escurrir la planta, para eliminar el exceso de agua. Se trata del mejor método para aquellas plantas colocadas en macetas o en tiestos pequeños, siendo también una especie de remedio para recuperar una planta que sufrió una excesiva exposición al calor sin suministro de agua, que inevitablemente la ha llevado a secarse. Podría parecer por su aspecto que es irrecuperable, pero con este método de riego por inmersión, algunas plantas logran sobrevivir; así que si te encuentras en esta tesitura, siempre prueba este método antes de tomar la última y definitiva decisión. También es la manera más adecuada de regar orquídeas, una planta muy sensible a los cambios de temperatura y al exceso de agua.

Fertilizantes

Residuos de café

Si sueles beber café directo de la cafetera, no tires los residuos, ya que tienes ahí un fertilizante casero. Estos son ricos en nitrógeno, fósforo, potasio, y además, aportan hierro y acidez a la tierra. Aplica dos o tres cargas en una botella de un litro y medio de agua por unas ocho horas. Cuela y con el líquido que resulte riega la tierra de tus plantas, no a la planta como tal. Recuerda que los nutrientes de tu fertilizante natural deben irse directamente a la tierra.

Arroz

El almidón que poseen estos granos ayudan a que la tierra se mantenga más fuerte y proporciona nutrientes a la planta. Si usas arroz como fertilizante natural, no dudes en aplicarlo con cuidado. Coloca dos tazas de arroz en un litro y medio de agua. Deja reposar por media hora, cuela y aplica cada dos semanas. En invierno puedes hacerlo mes con mes.

Cáscaras de huevo

Éstas son mucho más efectivas cuando tienes plantas aromáticas y medicinales. Si necesitas un fertilizante para ellas, no dudes en triturar cinco cáscaras de huevo en un bowl, mientras añades sal y lo viertes en un litro y medio de agua. Agita y aplica, es sencillo, pero muy benéfico para tus plantas.

Lentejas

Éstas actúan como hormonas vegetales que estimulan el enraizamiento, lo cual es ideal para plantas de jardín y huertos caseros. Para realizar un buen fertilizante casero con ellas, hay que dejar remojando unas dos tazas de lentejas toda noche. El agua que se produzca será la que usarás para regar la tierra abundantemente y cada dos semanas, o de lo contrario podrían crecer de más o muy rápido sin que te des cuenta.